agosto 31, 2011

volver

después de una, dos, tres copas llevar a alguien en la bici se vuelve una tarea fina. repartir volante y pedales, una misión suicida. ir gritando miedo y risas por los bvares quizás algo un tanto extremo. quiero decir, la punta de algo, el amor después del amor, la vida después del amor, la vida después de la muerte, la vida después de la vida, o la muerte y después nada. (o después esto, quién sabe, nadie recuerda si no nos morimos aquella noche)
después de una, dos, tres copas los escenarios cambian. el tiempo también, aunque el tiempo tiene la manía de ser siempre otro y no cambiar nunca.
(uh mo y un libro de mentira) solamente lo leo porque está cerca y necesito hacer de cuenta algo, cualquier cosa, aparentar autonomía, que no soy solamente una conexión de órganos, que tengo unidad y sentido, que existo a-par-te de él. que no lo orbito. establezcamos que todo esto es una gran mentira, que no lo conocí nunca pero lo quiero ya como un caprichomosntruo que se acaba cinc(oooooooooh!) minutos después. eso. sin embargo el libro me pierde y me ... , escucho mi nombre, tres, dos, una... veces. señor: usted ha desaparecido. una, dos, tres... sonrisa tímida, este mundo no es real, ah! sí, que tonta, yo te amaba, me decías?

3 comentarios:

  1. "después de una, dos, tres copas los escenarios cambian. el tiempo también, aunque el tiempo tiene la manía de ser siempre otro y no cambiar nunca."

    genial.
    me gustó.
    un beso!

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  2. "te morías por volver
    con la frente marchita, cantaba Gardel"
    Benevenuta!

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  3. Me encanta esa manera de escribir como escupiendo pensamientos.

    beso!

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AME, AME URGENTE